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Descubre los tipos de sistemas de riego más recomendados y cuáles son las características de cada uno de ellos.
Si llevas tiempo pensando y planeando el diseño de tu jardín, quizás una de las cosas que ya te hayas cuestionado haya sido el cuidado que requiere. En terrenos de gran tamaño, así como para ahorrar en mano de obra y tiempo de trabajo, los sistemas de riego son fundamentales para conseguir el mejor aspecto.
Además, contar con un sistema de riego nos ayuda también a mejorar el aprovechamiento del agua y el incremento de la productividad. En el mercado podrás encontrar modelos totalmente automatizados, por lo que tu jardín no tendrá que depender de nadie para mantenerse siempre fresco.
Pero llegados a este punto suele surgir una pregunta: ¿Qué sistema de riego es el que más te conviene? Para poder darte una respuesta, en el artículo de hoy te explicamos los tipos de sistemas de riego que puedes encontrar y cuáles son sus características. Si quieres descubrirlos, ¡sigue leyendo!
Tipos de sistemas de riego
A la hora de elegir uno u otro sistema de riego para nuestro jardín debemos evaluar diferentes parámetros. Los principales serán el económico y, por supuesto, el ecológico.
Aspersión
El riego por aspersión es uno de los tipos de sistemas de riego más conocidos. Todos hemos visto y sabemos cómo funciona un aspersor: se lanza agua desde un punto hasta otro, humedeciendo esa zona.
Se utilizan varios aspersores para poder cubrir toda la zona que se debe regar, estudiando bien su disposición para no dar lugar a la aparición de zonas muertas.
Entre sus ventajas destaca su capacidad de adaptación, pues puede ajustarse la orientación en la que expulsa el agua, así como la potencia, consiguiendo una precisión mayor. Si se estudia bien, y no se dejan zonas secas ni se orienta hacia direcciones innecesarias, el ahorro de agua puede ser considerable.
Eso sí, hay que tener cuidado. La humedad que provoca en las plantas, unido a las altas temperaturas, puede terminar provocando la aparición de hongos u otras enfermedades en la vegetación.
Goteo
El riego por goteo es otro de los sistemas más famosos. Por norma general se trata de una tubería especializada para el riego por goteo que se distribuye por toda la zona a regar. A lo largo de esta tubería se le van incluyendo goteros, a través de los cuales se suministra el agua de manera controlada.
Este es otro de los tipos de sistemas de riego que menos agua consume, además de reducir la proliferación de plagas y malas hierbas. Aunque hay que tener en cuenta algunos aspectos clave: una vez instalado, por ejemplo, no se podrá labrar el terreno.
Exudación
Este es uno de los tipos de sistemas de riego menos conocido, pero también de los más eficaces. Se trata de una manguera fabricada con un material poroso. El agua es distribuida a través de sus poros, de manera que se forma una cadena de humedad constante.
Va enterrada a unos 10 centímetros bajo la superficie del suelo, por lo que no es visible. Al ir a la altura de las raíces, donde la planta verdaderamente necesita el nutriente, se requerirá una menor cantidad de agua. Además, es capaz de humedecer grandes zonas, y es especialmente interesante para suelos arenosos.
Esperamos que este artículo te haya servido para descubrir cuáles son los tipos de sistemas de riego que tu jardín puede necesitar. ¿Quieres conseguir el mejor aspecto para tu jardín? En Urbanature somos una empresa de jardinería en Málaga. Apostamos por la tecnología y la innovación, trabajando para ofrecer a nuestros clientes siempre el mejor resultado. ¿Hablamos?